divendres, 27 d’abril del 2018

AYUDEMOS A NUESTRO BIENESTAR


Aunque nuestra vida se encuentre libre de situaciones tristes o preocupantes no es suficiente para sentirnos felices.
Sentirnos felices requiere también de una cierta actitud mental por nuestra parte.


Se ha observado que podemos sentirnos tristes por algún motivo, pero eso no excluye que algún estimulo exterior nos haga sonreír y alivie la pena que sentimos. Es decir la pena y la alegría pueden aparecer simultáneamente en nuestra mente. Es lo que en psicología se denominan ambivalencias.
Podemos mejorar nuestro estado de ánimo aún en situaciones que nos resulten penosas o estresantes.
Conocer cómo controlar nuestras emociones negativas nos puede ayudar a mantener la serenidad y buen humor incluso en las situaciones más difíciles.


Para conseguirlo tendríamos que poder mantener algunos hábitos tales como:
1) Amortiguar las emociones negativas cuando estas aparecen. Esto lo podemos conseguir escuchando música, dedicándonos una pausa para charlar con alguien en quien confiemos, o realizar alguna tarea que nos relaje.
2) Antes de tener que enfrentarnos con alguna situación negativa, podemos dedicar un tiempo para cuidarnos. Puede ser preparándonos algo agradable para comer, preparando la ropa con la que vamos a ir vestidos o cualquier otra actividad que ocupe nuestra mente en algo que nos resulte agradable.


Las emociones negativas son avisos que nos manda nuestra mente para que estemos preparados ante alguna situación preocupante. Una vez recibido el aviso nuestro cuerpo y nuestra mente pueden volver a relajarse.
Es posible entrenarse para poder dejar de sentir las emociones negativas cundo estas ya han cumplido su misión de avisarnos de algún peligro.
Si nos refugiamos en las emociones negativas o intentamos descargar la rabia o la pena que estas nos despiertan, solo conseguiremos prologar esa emoción negativa y que nuestro estado de ánimo empeore.
Podemos controlar las emociones negativas en el momento de su aparición:
1) Si las percibimos conscientemente por un instante.
2) Si las echamos deliberadamente hacia un lado.
3) Si continuamos con lo que estábamos haciendo antes de percibir la emoción negativa.


Controlar las emociones negativas es uno de los secretos de la felicidad.
Es algo que podemos aprender y que nos permite preservar nuestro buen humor para poder seguir disfrutando de las cosas buenas de nuestra vida.


Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada